OJO POR OJO… ¿CASUALIDAD? O VENGANZA EN TECAMAC Y COACALCO, MASACRAN FAMILIAS

COACALCO JUNIO 20 A

Sin pista de los sicarios que ejecutaron a quema ropa y sangre fría a cuatro integrantes de una familia en Coacalco, donde los sicarios mataron hasta al perro, mascota de la familia masacrada, donde sólo se sabe que las víctimas vendían droga, tal como ocurrió una semana antes en el municipio de Tecámac, donde otra familia dedicada a la misma actividad ilícita, también fue asesinada a balazos; aquí murieron cinco personas, incluidos dos menores de edad. La FGJEM investiga si hay alguna relación en ambos casos y, se trate de una posible venganza entre dichos grupos y familias.
Como se informó en este Semanario Mi Corresponsal, el pasado 9 de junio de 2025, cinco integrantes de una misma familia fueron asesinados a balazos dentro de su vivienda en Tecámac, Estado de México, en lo que autoridades presumen fue un ataque relacionado con la venta y distribución de drogas. Los hechos ocurrieron en la calle Primera Cerrada de Castillo, en la colonia del Castillo Atlatongo.
Testigos de los hechos, dijeron que al menos tres hombres armados llegaron al domicilio durante la madrugada y, tras ubicar a sus víctimas, dispararon múltiples veces dentro del inmueble. Las víctimas fueron identificadas como Rubén “N”, de 45 años; Fernanda “N”, de 23; Alicia “N”, de 65; Tadeo “N”, de 17; y Mayorli “N”, de 15. Todos recibieron múltiples impactos de bala, incluidos tiros de gracia.
Minutos después de la tragedia, arribó a ese domicilio la señora Ana María “N”, de 52 años, esposa de Rubén, quien narró a la policía que minutos antes ella y sus hijos habían regresado de un convivio. Al ingresar a su domicilio, encontró los cuerpos sin vida de su esposo, sus hijos y su suegra, tendidos en distintos puntos del inmueble y en medio de charcos de sangre. Confesó que su familia se dedicaba a la venta de drogas.

AHORA COACALCO
La tarde del pasado domingo 15 de junio, una semana después de la masacre en Tecámac, ahora en la Cerrada Liquidambar, esquina con Sauces, colonia Rinconada San Felipe, municipio de Coacalco, Estado de México, sicarios acribillaron a sangre fría y mataron a cuatro integrantes de una misma familia, dedicada también al narcomenudeo, informaron vecinos de la zona. El baño de sangre es muestra de que Coacalco sigue siendo tierra narca en manos del alcalde David Sánchez Isidoro.
Entre las víctimas se encontraba un joven de aproximadamente 21 años de edad, así como una mujer de aproximadamente 30 años y una adulta mayor de 70 años y un menor de edad, todos ellos fueron asesinados con armas automáticas calibre 9 milímetros, cabe subrayar, que es común hablar de ejecuciones, de balaceras, ejecuciones con armas de fuego, pero, la autoridad nunca ha investigado de dónde salen las balas de diversos calibres, dónde se venden, dónde está ese mercado negro de armas largas y cortas y balas de cualquier calibre.
De acuerdo a versión de los vecinos el departamento donde se registró la masacre, funcionaba como punto de venta de drogas, era la clásica ventanita, donde los consumidores, jóvenes llegan, tocan y son atendidos. Luego se van caminando, en moto o en automóviles. Las escenas eran cotidianas, pero, nunca se había registrado un hecho como el ocurrido la madrugada de ese domingo negro.
Como es rutina llegó la policía, patrullas, muchas patrullas, ambulancias, elementos de la Guardia Nacional, pero, lo único que había eran cuatro personas muertas, ejecutadas a boca de jarro, masacradas bajo una lluvia de balas, cuya tronadera llamó la atención de los vecinos y, por ello, llamaron a la policía. Elementos de seguridad pública acordonaron la zona y confirmaron que cuatro personas fueron halladas sin vida al interior del inmueble. En una de las habitaciones donde se encontraron dos de los cuerpos, había una ventana aparentemente adaptada para la venta de narcóticos.
Además, en la parte trasera del domicilio se localizaron plantas de mariguana y varias mariconeras con dosis de presunta droga junto a los cadáveres. Peritos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) realizaron el levantamiento de los cuerpos.
Al respecto cabe señalar que Coacalco el que fuera un municipio rural, hoy sus pueblos son colonias, fraccionamientos, es considerado un municipio dormitorio, porque gran cantidad de sus habitantes salen a trabajar y a estudiar ya a la ciudad de México o, a otros municipios como Tlalnepantla, Ecatepec y Cuautitlán Izcalli, entre otros, donde hay más opciones de empleo y estudio.
Aunque la Fiscalía mexiquense no se ha manifestado, no se descarta que ambas matanzas entre familias, estén relacionadas con los mismos grupos o pandillas que se dedican al narcomenudeo en esta zona del Edomex. Puede ser casualidad o bien, una liga de venganza en ambos casos, donde dos familias fueron asesinadas dentro de sus respectivos domicilios.