SE ROMPE EL PRI: EXPULSAN A DEL MAZO CALIFICAN A DEL MORAL DE CHAQUETERA

Por José Santos Navarro

Entre acusaciones, maldiciones, ofensas y grandes verdades de traición y cinismo, a sus 95 años de su fundación el PRI se desmorona y esta elección presidencial 2024, podría ser su sepultura ante la división y guerra interna donde Alejandro Moreno Cárdenas, Alito, dirigente nacional del tricolor y la élite dorada expulsaron al ex gobernador Alfredo del Mazo Maza a quien calificaron de “traidor”, mientras que a Alejandra del Moral quien -de última hora- renunció al partido y se sumo al apoyo de Claudia Sheinbaum, fue calificada por la élite priísta como “traidora y chaquetera”.
A la histórica elección de este 2 de junio la otrora poderosa “aplanadora”, el temible dinosaurio, terminó como rata de dos patas, pero con una larga, muy larga cola de corrupción. Quien por años gobernara el país, tuvo que asociarse al PAN y al PRD, en un acuerdo desesperado y de última hora para poder subsistir en el mapa electoral, pero, sobre todo, seguir viviendo, mamando de la ubre del erario público, porque quieren una rebanada del pastel del INE quien tiene 7 mil millones de pesos para repartir entre los partidos políticos, de acuerdo al voto obtenido en la elección de 2 de junio.
El primero en renunciar al PRI fue Eruviel Ávila Villegas, quien se fue al Partido Verde, para buscar impunidad a través de una diputación plurinominal. Abiertamente se pronunció en apoyar a Claudia Sheinbaum como candidata a la Presidencia de México. Su salida del partido, no causó tanto revuelo en el PRI como la renuncia al partido de Alejandra del Moral, quien al verse desprotegida y no tener lugar en el Senado ni en la Cámara de Diputados, decidió negociar con Morena y de manera pública se pronunció también en apoyo de Claudia Sheinbaum, aunque, la misma candidata a la Presidencia y la dirigencia nacional de Morena, sostuvieron que no se negoció nada con Alejandra del Moral.

LA GUERRA
El jueves 30 de mayo La Comisión Nacional de Justicia Partidaria del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Revolucionario Institucional (PRI) expulsó al exgobernador Alfredo del Mazo Maza a quien calificó de “traidor”.
La élite dorada de lo que queda del PRI, consideró que Del Mazo Maza pactó con el presidente Andrés Manuel López Obrador la entrega del gobierno del Estado de México que durante más de 90 años gobernó el tricolor. Esta fisura en el tricolor, es el anuncio de que todo acabó para aquel partido y gobierno federal que durante décadas mantuvieron el control de las elecciones de todo tipo a lo largo y ancho del país, siempre con trampas, dudas, abusos, sangre, traición, violencia y la elemental entrega de dádivas y acarreos.
Esta elección presidencial 2024 es histórica porque por primera vez en la historia del país, una mujer es presidenta de México, al cierre de esta edición y de la encuesta de salida, todo indicaba que el triunfo electoral de Claudia Sheinbaum, candidata de la coalición “Sigamos Haciendo Historia”, era inevitable.

ALEJANDRA
La renuncia al PRI de Alejandra del Moral causó una fuerte sacudida en el PRI nacional y estatal. Se va con una larga, muy larga cola de corrupción, de tráfico de influencias, busos, omisión y sucio enriquecimiento muy explicable.
La jugada de Alejandra del Moral quien fuera pieza clave en el ajedrez de la corrupción priísta y quien buscaba protección e impunidad como candidata a diputada federal plurinominal en la coalición PRI, PAN y PRD, quedó en sexto lugar de la lista, lo cual, significaba que no alcanzaría ese privilegio.
Del Moral, al ver que quedaría desprotegida, ante la posibilidad de que la coalición “Fuerza y Corazón por México”, obtuviera una baja votación en las urnas y ella, prácticamente sola, sin protección política y en la calle, quedaría a merced de la Justicia. Por ello, decidió mover su alfil, hablar con Clara Sheinbuam y convencerla de que su apoyo era leal y real. La candidata presidencial de Morena, partido que está recibiendo toda clase de cascajo político, declaró que el apoyo de Alejandra del Moral no significaba incorporarse a Morena ni se negociaba un cargo para la expriísta.
La estrategia de Morena es clara. El partido necesita gente, más pueblo, más políticos hombres y mujeres y por ello, se presume que la negociación por debajo de la mesa es clara: Alejandra del Moral tiene un buen capital político, al igual que Eruviel Ávila Villegas quien también a través del Partido Verde apoya a Claudia Sheinbauam.
Ambos, Alejandra y Eruviel tienen un gran capital político en el Estado de México, ambos cojean de la misma pata, son corruptos, tienen larga cola que les pisen y, su estrategia es clara: negociar con Morena -que tiene posibilidad de triunfo y de futuro-, votos a cambio de impunidad. No es nada nuevo en la política mexicana.
En todos los partidos políticos en México se da ese fenómeno de saltar de un partido a otro, así como los futbolistas cambian de camiseta por más dinero, así en la política hay hombres y mujeres que no buscan servir, ser funcionales a la gente, a sus representados, sino, lo único que buscan como toda la clase política en México -con algunas excepciones-, es el dinero, el poder, fuero e impunidad.
El tiempo dirá si Alejandra del Moral renunció al PRI en defensa propia o, podría ser parte de una conspiración, donde desde adentro de Morena, hacer un trabaja de división, demolición. Sería como una espía dentro de Morena, para pasar información confidencial de los planes, proyectos y pasos de los programas de Morena.
Alejandra podría ser una espía peligrosa, como lo fue Lilly Téllez, quien se arrimó a Andrés Manuel López Obrador cuando éste era candidato a la Presidencia, se ganó la confianza, ganó el cargo de Senadora de la República por Sonora y, teniendo seguro su escaño, dio también el “chaquetazo” y se fue al PAN. Está considerada como una traidora, pero, además, se convirtió en una de las más críticas del gobierno de AMLO. El caso de Alejandra del Moral, podría ser igual, otro Caballo de Troya.

EXPULSADO
Otro gran escándalo político fue la expulsión del PRI para el ex gobernador del Edomex, Alfredo del Mazo Maza, a quien Alejandro Moreno, Alito, sin andarse por las ramas calificó de “traidor” de haber entregado el gobierno de la entidad mexiquense a Morena.
Alfredo del Mazo Maza no se quedó callado, como pocas veces habló fuerte y se subió al ring con Alito. Hizo pública una carta a través de las redes sociales donde sostiene que la actual dirigencia del Comité Ejecutivo Nacional “ha perdido el rumbo y no representa los principios y valores que dieron origen, vida e historia a nuestro partido. Se han olvidado de las causas sociales para poner por encima los intereses personales”.
“He decidido renunciar a toda una vida de militancia en el PRI, el cual, ahora tiene una dirigencia con “resultados mediocres, que divide a la militancia y que traiciona a los principios del partido mismo”. Afirmó que Moreno, con sus hechos, ha demostrado ser alguien “nada confiable, un mentiroso, cínico y traidor. Es un personaje nocivo y ha perdido toda calidad moral dentro y fuera del partido”.
Indicó que Alito “ha sido expulsado del ánimo, la conciencia y la esencia de millones de priistas. Se está quedando solo, abandonado y se ha convertido en el enterrador del PRI”.
En esta guerra de dimes y diretes entre priístas, el ex gobernador Arturo Montiel, también metió su cuchara y tras criticar la renuncia de Alejandra del Moral, dijo: “Qué bueno que se fue… además se va sola.”